Es que te acojona que haya alguien ahí fuera dispuesto a ayudarte, a quererte, sí, y te da miedo que de repente descubran que en realidad eres alguien a quien no merece la pena querer..

jueves, 30 de diciembre de 2010

Respiró con calma, después de ese dolor de pecho, después de tantas lágrimas y la respiración entrecortada, después de pasos sin saber a dónde, con el frío rozándome la cara y enrojeciendo mi nariz y mis ojos.
Sé que no será fácil y que viene épocas de cambios, de empujar, de hacernos ver fuertes; no he perdido la fe , creo en mi misma, por primera vez creo en mi y voy a quererme.

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